San Luis Potosí, México (13 noviembre 2017).- Con tan solo cinco años de edad, Ángel Benjamín González lucha por su vida, desde los dos años cumplidos se le detectó el síndrome nefrótico, una enfermedad que afecta el funcionamiento de los riñones y a pesar de ello, el menor está lleno de sueños e ilusiones, uno de ellos fue ser policía por un día, así lo señaló Leticia Ramírez Esparza, madre del menor. "Empezó hinchado de los párpados y le empezaron a hacer muchos estudios y no le encontraron nada hasta que dieron con lo que tenía, los riñones".

Ángel tiene que ser sometido a un fuerte tratamiento para controlar su enfermedad, pues lo que realmente necesita es un trasplante de riñón, para mejorar su calidad de vida, pero hasta el momento no hay noticias para realizarlo. "Aún todavía no nos dicen de un trasplante, aún no nos han dicho si ya es tiempo, ahorita que es normal, pero antes era muy difícil porque no tenía que hacer mucho esfuerzo porque tenía la presión muy alta, por lo regular tenía que estar en reposo".

Asegura su mamá que el niño está consciente de su enfermedad, en un principio se deprimió, pero la ilusión y los sueños volvieron tras querer ser policía, por lo que una asociación civil lo apoyó para que así fuera. Desde temprano Ángel llegó al edificio de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) portando el uniforme como el resto del personal de la corporación, pasó lista al grupo de policías estatales que lo esperaban en formación y como parte del protocolo, se le hizo entrega de su nombramiento de Policía Estatal Honorario. Los padres tienen la esperanza de que Ángel pronto vuelva a ser un niño normal, sano, pues siete niños con padecimientos graves han sobrevivido y mejorado su salud después de cumplir el sueño de ser Policías Honorarios.