DENVER. Todo le salió mal a este delincuente. Un hombre que pretendía robar una tienda de cigarros electrónicos en la ciudad de Aurora, Colorado, terminó huyendo despavorido por su propia culpa. Al intentar amagar con una pistola a la dependienta del establecimiento, el asaltante tiró accidentalmente el arma del otro lado del mostrador. Aunque el sujeto quiso recuperarla, su lenta y torpe reacción se lo impidió. La empleada, que en un principio pareció quedar en shock, respondió con rapidez y se hizo con la pistola, mientras el delincuente emprendía la retirada. Para colmo, cuando el individuo logró salir del establecimiento, se le cayeron los pantalones. El suceso ocurrió la semana pasada y fue captado por las cámaras de seguridad de la tienda. La policía informó que no se hallaron huellas del sospechoso en el arma ni en el lugar, ya que portaba guantes. Pero divulgó las imágenes del suceso para pedir ayuda a la comunidad para identificarlo. No quiero minimizar la seriedad de un robo a mano armada, pero este tipo realmente pertenece al club de los criminales más torpes del mundo", comentó Chris Burgess, dueño de la tienda.

Necesita encontrar una nueva carrera”, bromeó.

-- Excélsior