El US Open vuelve a tener semifinales femeninas cien por ciento estadounidenses 36 años después. Con la victoria de Madison Keys 6-3, 6-3 sobre la tenista de Estonia, Kaia Kanepi, este miércoles en los cuartos de final, son cuatro las representantes locales en la antesala de la final. Más temprano, su compatriota Coco Vandeweghe se impuso a la preclasificada número uno, Karolina Pliskova, 7-6(4) y 6-3 para sellar su boleto a semifinales. Mientras que Sloane Stephens y Venus Williams lograron el pase el martes tras vencer a la letona Anastasija Sevastova y la checa Petra Kvitova, respectivamente. Es la primera vez que cuatro jugadoras estadounidenses llegan a las semifinales en una misma edición del US Open desde 1981, cuando lo hicieron Chris Evert, Martina Navratilova (justo ese año se convirtió en ciudadana tras desertar de Checoslovaquia), Tracy Austin y Barbara Potter. Desde entonces, el máximo había sido de tres representantes locales. En 2001 fueron Serena y Venus Williams y Jennifer Caprati; un año después, repitieron las hermanas y se sumó Lindsay Davenport. Para encontrar a puras jugadoras nacidas en Estados Unidos en las semifinales del torneo hay que remontarnos a los 50. En la edición de 1957, Athea Gibson, Louise Brough, Dorothy Knode y Darlen Hard disputaron los dos boletos al duelo por la corona.

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Mediotiempo