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Ante cualquier denuncia los choferes son dados de baja, pero si la quejosa está mintiendo Uber lo sabe, gracias a la capacitación que reciben sus agentes de parte del FBI
23:34 martes 4 septiembre, 2018
San LuisA raíz de los problemas de inseguridad en que se ha visto envuelta, la empresa Uber robusteció sus protocolos de seguridad y asumió ésta como una de su prioridades. De acuerdo a portavoces de la aplicación, los filtros para selección de socios conductores se mejoraron y en casos de presunto abuso sexual en contra de usuarios se aplica una política de “tolerancia cero”. Christian Gutiérrez, gerente de Centros de Activación y Soporte de Uber, explicó que ahora para ser socio conductor de la aplicación los interesados deben aprobar tres filtros: 1-Filtro de documentos personales. Por ejemplo, carta de antecedentes no penales. En este punto, según detalló, más de 25% de los documentos son rechazados por alguna inconsistencia. 2-Examen psicométrico. Para superar este filtro es necesario responder satisfactoriamente una prueba de 52 reactivos divididos en nueve temas: inteligencia, respeto, respeto a normas viales, servicio al cliente, inteligencia emocional, colaboración e identificación de tendencias hacia la violencia, manipulación y acoso sexual. En 2017, precisó Uber, 32 mil personas fueron rechazadas por no aprobar este examen. 3-Aprobación de filtro de confianza. Para completar este filtro, Uber contrató a una empresa externa que se encarga de investigar los antecedentes penales, de los interesados en conducir, en más de 500 bases públicas estatales y federales, en las que se incluyen busquedas de condenas por delitos sexuales en Estados Unidos. Se revisa, incluso, el Buró de Crédito. En 2017, más de 40 mil personas no pasaron los filtros de seguridad. Uber sostiene que gracias a la implementación de los nuevos filtros de selección solo el 12% de los candidatos que inician el proceso de registro logra volverse conductor de Uber, ¿QUÉ HACER SI SUFRES ACOSO? Si a pesar de estos filtros de seguridad, algún usuario de Uber se siente acosado o sufre algún tipo de abuso sexual, Alfonso González, gerente de Atención a Emergencias e Incidentes de Uber Latinoamerica, enlista los siguientes pasos a seguir: >Activar el botón de pánico para compartir la ruta con algún conocido o llamar a la policía. >Denunciar el incidente en la sección ayuda, informa un problema con este viaje, comentarios sobre el conductor, el comportamiento de mi conductor se hizo sentir inseguro. En este apartado se permite al cliente redactar la historia de lo sucedido. >Denunciar el incidente a la policía. De esta manera, si se cometió un delito el agresor puede ir a la cárcel y si así se requierre, Uber puede entregar a las fiscalías de los estados, información sobre el conductor. En casos de acoso, Uber aplica una política de “tolerancia cero” y ante cualquier denuncia, inmediatamente desactiva la cuenta del socio conductor. Eugenio Calvillo, socio conductor de Uber, criticó este política de la empresa y la calificó como “insegura, porque ilusiona a mucha gente, de que van a tener trabajo, de que compren un carro, y en el momento, con el más mínimo pretexto, o un comentario negativo o que se preste a otra cosa, de un cliente, te bajan de la plataforma, te dejan con los carros embarcados, con la cuenta embarcada”. Pero Alfonso González insiste que la seguridad es prioridad y que está por encima de cualquier otro interés. Sin embargo, reconoció que no se puede considerar una denuncia como real hasta no investigar los hechos. Por esta razón, Uber tiene un grupo de agentes que atienden los casos de mayor sensibilidad y si se trata de acoso sexual, las que atienden a las víctimas son mujeres. Estos agentes son capacitados en manejo de crisis por el Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, en técnicas de investigación por la Oficina Federal de Investigacion o FBI y reciben actualizaciones por parte de la DEA. Por ejemplo, si una mujer acusa a un conductor de acoso sexual se analiza el comportamiento del conductor en viajes previos y se contacta vía teléfonica a la quejosa, para realizarle una batería de preguntas especializadas que permiten identificar si está diciendo la verdad. En las respuestas todo cuenta, desde el tono de voz, hasta la historia narrada.