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Recobremos los valores fundamentales con el talento y alegría que surge del sentimiento...
00:02 martes 3 enero, 2023
ColaboradoresRecobremos los valores fundamentales con el talento y alegría que surge del sentimiento; demos pie al rumbo histórico que merece la nación Al iniciarse un año más, el ritmo inexorable del tiempo nos marca un nuevo hito en el destino de una humanidad, cuyos avances tecnológicos y científicos han sido extraordinarios, paradójicamente el desarrollo individual ha decrecido con la aplicación inmoderada de las redes sociales y el internet, que entre otras cosas han creado vidas paralelas y artificiales a miles de jóvenes que pierden su identidad; acaso como una protesta silenciosa e inconsciente contra la destrucción de los más altos valores humanos, que se realizan al amparo de los nuevos paradigmas, donde el valor monetario ha sustituido cualquier concepto ético, jurídico y moral. En efecto, el dinero es el nuevo Dios de la sociedad contemporánea y su adoración se consuma con la sociedad neoliberal, donde el derroche absurdo e innecesario rigen los modelos de la conducta económica personal. Transcurrió un año marcado por el final de la pandemia y la absurda guerra en Ucrania, un tiempo en que los valores democráticos han sido violentados por un nuevo autoritarismo. Ante el fracaso de las políticas de distribución de la riqueza, que han creado más miles de millones de pobres que en cualquier otra etapa de la historia, la inflación ha sido producto de una política económica equivocada y, su combate, es peor todavía, pues reducir el crecimiento para frenarla, significa hacer más pobres a los pobres y, como siempre, acrecentar la riqueza de quienes tienen más. En México, la polarización y el lenguaje del odio prevalecen en la conversación pública, mientras que en el territorio, la delincuencia —organizada o no— aterra a una sociedad cada día secuestrada por las fuerzas de la violencia. No obstante, la grandeza del espíritu humano siempre ha de surgir con una luz alumbrada por la esperanza, por la alegría, por el amor, por aquellos valores que hacen del ser humano un ser superior. Todavía prevalece en el corazón de los pueblos mexicanos en su música, gastronomía y tradiciones de fin de año, esa luz que nos da confianza en que podemos emprender un futuro más luminoso y justo. Recobremos los valores fundamentales con el talento y alegría que surge del sentimiento; enfrentemos al mundo enrarecido por el absurdo y demos pie al rumbo histórico que merece la nación. En 2023, en la arena política mexicana, se definirán las candidaturas para la elección de 2024: en el frente oficial todo parece indicar que la decisión Presidencial —y no las supuestas encuestas— decidirán la candidatura de Claudia Sheinbaum, quien tendrá una campaña no tan fácil como esperan, pues la oposición va a concentrar las fuerzas de quienes no están de acuerdo con el gobierno de López Obrador. Es decir, si bien el Presidente juega el papel de unificar el oficialismo, también tiene el mismo significado al convertirse en el adversario común de todos aquellos a quienes no gusta este gobierno. La lucha electoral será encarnizada y tendremos un año de enfrentamientos; ojalá estos se realicen bajo la más estricta conducta apegada al Derecho y a las normas democráticas. Resolver en paz nuestro futuro es la obligación colectiva del año 2023, en el que se abren las puertas de un nuevo horizonte. POR ALFREDO RÍOS CAMARENA
CATEDRÁTICO DE LA FACULTAD DE DERECHO DE LA UNAM
PRESIDENTE DEL FRENTE UNIVERSITARIO LATINOAMERICANO (1958-1962)
VICEPRESIDENTE DE LA SOCIEDAD MEXICANA DE GEOGRAFÍA Y ESTADÍSTICA