Tras la propuesta del Ayuntamiento de bajar el límite de velocidad en el Río Santiago de 60 a 40 kilómetros por hora, los ciudadanos opinaron que bajar la velocidad podría resultar contraproducente. Claudia Gallegos comentó que el límite que se ha estado manejando es el adecuado, y  que si realmente se respetara ese límite, no habría tantos accidentes y no existiría la necesidad de tomar estas medidas. ‘’Si en verdad fueran a 60 kilómetros por hora no se necesitaría bajar la velocidad ya que es una buena velocidad, el problema es que la gente va realmente a 100 o a 120 y el Río no está para eso, en especial por las lluvias y las curvas’’. El conductor Carlos Almendárez mencionó que una velocidad tan baja en el Río Santiago puede ocasionar incluso más accidentes. ‘’Nadie va a respetar ese límite, y si alguien llega a hacerlo podría ocasionar un accidente’’.   El conductor Ernesto Hernández, coincidió en que el real problema no es el límite de velocidad ya establecido, sino que no se respeta y no se sanciona. A su vez, comentó que el Río Santiago se vuelve más peligroso por las noches, pues todos manejan aún más rápido. ‘’Es una vía muy peligrosa, ahí no miden la velocidad para nada. Aunque tú respetes el límite, no falta el atrevido que lo rebasa y no falta el accidente’’. Los ciudadanos expresaron que una mejor alternativa es hacer respetar los límites ya establecidos por medio de vigilancia y subir las multas si es necesario.