La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) admitió el caso Pasta de Conchos, por lo que evaluará la responsabilidad del Estado mexicano en la muerte de 65 mineros. La petición fue presentada por las familias de los mineros en febrero de 2010, en la cual acusan al Estado por su inefectividad en las inspecciones laborales en la mina, por demora injustificada y falta de debida diligencia para esclarecer y sancionar los hechos. "La CIDH dio la razón a las familias, observando, entre otros, que: 'luego de doce años de ocurridos los hechos, no se han determinado las causas de la explosión, la presunta responsabilidad de servidores públicos, ni se han recuperado los cuerpos de los trabajadores mineros'", informó el Centro ProDH. El siniestro ocurrió en febrero de 2006 en una mina de carbón operada por Grupo México, dónde aún yacen los mineros. Las familias acusan al Estado mexicano de obstaculizar el proceso de recuperación de cuerpos y la sanción contra los funcionarios que omitieron garantizar la seguridad en la mina. En la evaluación de fondo del caso, la CIDH analizará las violaciones del Estado a los derechos a la vida, la integridad personal, el acceso a la justicia para las familias, así como a los derechos económicos, sociales y culturales de los mineros. "La admisión del caso por la CIDH representa un avance histórico para las familias en su búsqueda de verdad, justicia y reparación integral, empezando por el rescate de sus familiares", celebró el Centro Prodh. El informe final de la CIDH, agregó, podría contener recomendaciones para mejorar las condiciones laborales de todos los mineros en México. -- Reforma