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Sin duda, la conformación del mapa político surgido después de la jornada electoral del pasado primero de julio, obligará al gobierno federal y estatal a diseñar nuevas estrategias que permitan generar una continuidad en los proyectos y trabajo que estén comprometidos para contribuir al desarrollo de una comunidad, municipio o región.
23:34 lunes 13 agosto, 2018
VIRALESSin duda, la conformación del mapa político surgido después de la jornada electoral del pasado primero de julio, obligará al gobierno federal y estatal a diseñar nuevas estrategias que permitan generar una continuidad en los proyectos y trabajo que estén comprometidos para contribuir al desarrollo de una comunidad, municipio o región. Esta situación, no escapa al reto que tendrá San Luis Potosí, con sus nuevas autoridades municipales que entrarán en funciones a partir del primero de Octubre próximo, donde será muy interesante, el conocer el perfil de cada uno de los presidentes municipales que estarán al frente de esa responsabilidad, durante el próximo trienio, aunque hay que recordar que algunos de ellos, estarán de nueva cuenta, gracias a la reelección que les permitió mantenerse en el poder. Es claro que varios de los alcaldes electos, ya vienen con algún tipo de compromiso asumido previo a las pasadas elecciones y será complicado que incumplan e incluso buscarán hacerlo por encima de los propios intereses de sus representados. Confianza hay mucha en torno a estas nuevas autoridades, pues el mensaje de la pasada elección fue muy claro, en el sentido del cansancio que tiene la población en torno a las conductas que venían asumiendo las autoridades y que en la mayoría de los casos quedaron en la impunidad con la reciente aprobación de sus cuentas públicas. No se puede soslayar que estos compromisos, incluyen a los alcaldes salientes, pues seguramente las nuevas autoridades en varios de los casos se tendrán que hacer de la vista gorda para no denunciar lo que verdaderamente encuentren. Desde ahora, podríamos asegurar que no es complicado, el saber en qué condiciones heredarán las administraciones, si tomamos en cuenta que se vienen arrastrando un sinnúmero de laudos laborales, endeudamiento, falta de claridad en obras, proyectos inconclusos y por si fuera poco, una falta de transparencia en la aplicación de recursos públicos. Aunque será complicado que los alcaldes se desliguen de sus filias partidistas, es claro que se requiere que los 58 ediles, tengan la voluntad de trabajar de manera coordinada con un gobierno del estado emanado de las filas del PRI, o un nuevo gobierno federal salido de Morena. Lo importante, será que se privilegie la coordinación, porque en eso de las venganzas o revanchismos políticos, el único perdedor es el ciudadano, “el de pie, como usted y como yo”.
APUNTES NO AL FRACKING.- Fue muy importante que el Gobernador del Estado Juan Manuel Carreras López, atendió a representantes de comunidades de la huasteca potosina a quienes les reiteró que de acuerdo a información de la Secretaría de Energía y de Petróleos Mexicanos no hay intenciones de utilizar fractura hidráulica en San Luis Potosí, tema que quedó claro es de competencia federal. Además, fue claro que se suma a la voluntad de las comunidades, para revisar con los nuevos integrantes del gobierno federal, las intenciones para cualquier tipo de exploración o explotación en la región, en lo que se debe respetar el marco legal, el cuidado al medio ambiente y los derechos de las comunidades CRECIMIENTO DE SLP.- Afortunadamente, la actividad industrial en la región del Bajío registró un crecimiento, promedio, de 6.4 por ciento anual, en abril de 2018, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el avance en la zona estuvo apoyado principalmente, por un incremento de 21.2 por ciento en San Luis Potosí, que tuvo un mayor desempeño en actividades como la construcción y el sector manufacturero. En las industrias manufactureras, Aguascalientes tuvo un aumento de 2.1 por ciento, en el lapso de referencia; Guanajuato, de 1.2 por ciento; Querétaro, de 8 por ciento; y, San Luis Potosí, de 23.1 por ciento.