La policía de Florida arrestó a tres jóvenes que ingresaron con un AK-47 al complejo Mar-a-Lago, propiedad del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Michael Ogrodnick, portavoz de la policía de Palm Beach, detalló que los hechos ocurrieron el pasado viernes, cuando los jóvenes de 15 años saltaron una pared de dicho complejo, mientras huían de las autoridades. En su intento de darse a la fuga, los jóvenes arrojaron una mochila, que traía un mini AK-47 con una revista cargada de 14 cartuchos. Ogrodnick detalló que la persecución comenzó luego de que un oficial se acercó a los jóvenes, quienes estaban dentro de un automóvil, a unos kilómetros al norte del complejo Mar-a-Lago. Cuando los menores de edad vieron que el policía se les acercaba, encendieron el auto para intentar escapar, pero al darse cuenta que otra patrulla estaba cerca, descendieron del vehículo y corrieron hacia los terrenos del complejo residencial, donde fueron detenidos. Por fortuna no estaba el presidente ni ningún miembro de su familia en la residencia, de lo contrario los agentes del Servicio Secreto pudieron haberles disparado. “No trataron de entrar en ningún edificio, simplemente saltaron el muro e intentaron esconderse”, dijo Ogrodnick.

Aunque negaron ser dueños del AK-47, diciendo que se lo habían encontrado, los jóvenes fueron trasladados a un centro juvenil, donde fiscales tomarán la decisión si deben o no ser juzgados como adultos. -- REUTERS