CIUDAD DE MÉXICO.- Tienen 17 años y ya son emprendedores, su negocio se llama Vezi, una startup de publicidad en automóviles que arrancará el año con diez unidades en circulación. José Bernardo Gil, director Comercial y de Marketing, explicó a Excélsior que Vezi consiste en hacer que los automovilistas se inscriban en la compañía; posteriormente una marca se anunciará en sus vehículos, servicio por el cual los conductores podrán cobrar entre mil 200 y mil 800 pesos mensuales. La idea surgió después de ver cómo se promueve la venta de autos escribiendo en el parabrisas trasero que está disponible y cómo ese mismo mecanismo podía servir para anunciar diferentes productos. "Después, te pones a investigar y esta misma idea de negocio existe en diferentes partes del mundo, en Estados Unidos, en Francia; es un negocio que se puede explotar al máximo y tiene un potencial enorme”, acotó Gil.

El nombre nació de la palabra rumana vezi, que significa ver: “Cuando buscamos el nombre no había uno bueno porque todos estaban registrados, no teníamos nada, entonces necesitamos ver más allá, nos llevó a que ver en rumano es vezi, entonces cuando vimos la palabra se iluminó todo”, explicó el directivo. Para formar parte de Vezi, los automovilistas pueden inscribirse a través de su página; posteriormente se entrevistarán con los ejecutivos y tendrán que pasar algunos exámenes para saber si son idóneos para representar a las marcas y convertirse en vezi-nos; en tanto, las marcas que decidan anunciarse en Vezi se convertirán en embajadores. El reto: el dinero Vezi está formada por tres socios: José Bernardo Gil, director Comercial y de Marketing; Diego Maysse, director administrativo, y Emilio Gutiérrez, director financiero, todos de 17 años, por lo que obtener los recursos para arrancar el negocio fue retador. Para lanzar el negocio conseguimos inversión de familia; fue difícil para nosotros conseguir el dinero, sabemos que el dinero no sale del árbol, cuando platicas una idea que es muy bonita, puedes enamorar a muchas personas, pero traducir una idea a un negocio es difícil”, reconoció Gil. “Ahí la tuvimos difícil, nuestros papás son personas que han logrado ser exitosos en el medio de las empresas, pero justo por eso no nos pueden dar las cosas fáciles, nos pusieron los pies en la tierra”, sostuvo.

El negocio empezó a tomar forma a partir de agosto del año pasado, pues lograron obtener recursos para arrancar por 250 mil pesos, no sólo de familiares, sino de otros inversionistas que confiaron en ellos. De los diez autos que empezarán a circular bajo el esquema Vezi, cinco promoverán al Chuck E. Cheese´s de Santa Fe, la otra mitad a una empresa de bienes raíces. -- EXCÉLSIOR