Un mes después que perdiera la elección de dirigente nacional del PAN, Manuel Gómez Morín reapareció en público para entrevistarse con Marko Cortés, el ganador de la contienda. El nieto de Gómez Morín había cuestionado, durante la campaña, las condiciones de inequidad de la competencia; en el debate que protagonizó con Cortés, acusó a éste de pertenecer al grupo que desfiguró al blanquiazul, el liderado por el ex candidato presidencial Ricardo Anaya. A través de un comunicado, se informó que el dirigente y el ex candidato sostuvieron una reunión de trabajo para "reposicionar" a Acción Nacional. "Los panistas coincidieron en facilitar y transparentar los procesos de afiliación, la revisión integral de los estatutos del partido, restablecer los cursos de doctrina y formación a la militancia y volver al PAN más atractivo para los jóvenes", se informó. "Reunidos en la sede nacional del PAN, convinieron en la necesidad de promover una misma visión como partido, que se base en los valores que queremos como sociedad, atienda la coyuntura social y defienda los intereses de las grandes mayorías, afectadas por la incertidumbre económica que provocan las malas decisiones y medidas populistas del actual régimen en los mercados internacionales." Gómez Morín expresó su determinación de fortalecer una militancia de valores y con valores, para darle nuevamente sentido al partido. Marko Cortés agradeció la disposición del primero y su equipo para integrarse en diferentes espacios de los órganos de decisión partidistas, a fin de construir juntos el PAN y la oposición que México requiere en las actuales circunstancias. Morín estuvo acompañado por la que fue su compañera de fórmula, la consejera jalisciense Mirelle Montes. --

REFORMA