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Exclusiva
Mediante una carta entregada en las oficinas centrales en la Ciudad de México advierten que dejarán de prestar servicios correspondientes al Tercer Nivel ya que el Hospital General es considerado de Segundo Nivel
01:42 martes 12 noviembre, 2019
San LuisMédicos de base del Hospital General de San Luis Potosí del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) advirtieron en un segundo oficio al director general Luis Antonio Ramírez Pineda ´la suspensión del servicio que corresponde a un Tercer Nivel, debido a las precarias condiciones en las que han laborado en los últimos años. Según explicaron La demanda en la atención de los derechohabientes en la actualidad supera con mucho a la que se puede proporcionar, por lo que, en un futuro inmediato, las instalaciones del Hospital y sus recursos humanos serán insuficientes para dar la atención adecuada a más derechohabientes. “Estamos vulnerables a mala praxis, por lo que estarán siempre latentes demandas por parte de los usuarios derechohabientes, tanto para nosotros los médicos como principales responsables del acto médico como para el ISSSTE como corresponsable, lo anteriormente mencionado creemos que se debe a una deficiente planeación tanto de los recursos humanos como materiales, situación ésta, que se ha agudizado en este año en curso”. La problemática se expuso en referencia a la estructura física del Hospital en todas sus instalaciones, la cual se torna crítica al no cumplir con la Norma Oficial Mexicana NOM-016-SSA3-2012, que establece las características mínimas de infraestructura y equipamiento de hospitales y consultorios de atención médica especializada.
Señalaron que el Hospital número 1 está considerado como de Segundo Nivel, de acuerdo a los lineamientos para clasificar unidades médicas del ISSSTE, puesto en servicio hace aproximadamente 60 años, motivo por el cual es prácticamente imposible que en la actualidad cumpla con todas y cada una de las características señaladas en la NOM ya que se encuentra rebasado por la demanda de servicios de los derechohabientes.
Las fallas en detalle
Pero también enlistaron la serie de observaciones que dejan en un estado deplorable a este hospital:
En el servicio de urgencias, hay solo 14 camas de internamiento, algunas en mal estado; una sala muy mal equipada, para la realización de endoscopías. Solo existen tres quirófanos y una sala de expulsión, asignados para la realización de todas las cirugías; “al presentarse una urgencia, una cirugía contaminada, o de larga duración, común en procedimientos Oncológicos y/o Neuroquirúrgicos, un retraso por no realizar el aseo en forma rápida, o no contar con equipo de enfermería y/o servicio de Anestesiología, se retrasan o suspenden las cirugías” además de la falta de aire acondicionado. En el área de recuperación postquirúrgica no se cuenta con médico anestesiólogo, lo que conlleva a potenciales complicaciones en estos pacientes, incluyendo la muerte, como ya ocurrió en alguna ocasión; “en este sentido las autoridades han sido omisas y complacientes al no contratar con un médico anestesiólogo por turno que sea responsable de estos pacientes, evitando así, lo mencionado previamente”. Vestidores de uso común para todo el personal lo que permite contaminación de virus, en la consulta externa ningún consultorio cumple con la NOM, en lo que respecta a espacio físico, mobiliario, iluminación, ventilación, además existe una enfermera que brinda asistencia hasta a 4 o 5 médicos a la vez. “Al no contar con la presencia física de la enfermera, hemos tomado la firme decisión, de que, a partir de la fecha, suspenderemos la consulta, cada vez que no tengamos el apoyo personalizado de enfermería. En el Hospital solo cuenta con 78 camas censables, por lo que son insuficientes lo que conlleva a la recurrente suspensión de cirugías programadas, “Todos los cuartos son salas generales, existiendo solamente, en todo el hospital, un ‘cuarto privado’ que es utilizado como ‘cuarto de aislamiento’ para pacientes infectados, por lo que es muy frecuente, que, en el caso de pacientes infectados o inmunocomprometidos se tengan que ‘aislar’ en una sala de 3 camas, bloqueando en consecuencia dos camas”. También existen deficiencias en Terapia Intensiva donde no existe ni médico intensivista; el servicio de hemodiálisis no existe; en el área de diálisis peritoneal se encuentra poco salubre, y la sala de hemodinámica ni siquiera es propiedad del ISSSTE y solamente funciona en el turno vespertino. Lo mismo en el Área de enseñanza y de Servicios Generales. De igual forma la situación grave del desabasto de medicamentos.
Condiciones laborales al límite En el Instituto existe un presupuesto destinado a solventar el tema de “guardias y Suplencias”, sin embargo, en nuestro hospital no es claro o el presupuesto destinado para este rubro no se aplica, puesto que cuando salimos de permiso, económico con o sin goce de sueldo, a congresos o vacaciones, no se cubre la ausencia, por lo que la consulta se reprograma y al regresar, por espacio de algunas semanas nos vemos rebasados en el volumen de trabajo. Además es habitual y común que existan servicios sin apoyo de enfermería por la falta de éstas al no planear adecuadamente las suplencias, llevando esto a una mala atención de los derechohabientes. Con frecuencia, se efectúan procedimientos que deberían realizarse en un Hospital de tercer nivel, como lo son: cirugías de Cirugía general, plástica, urología, ginecológica, Neurocirugía éstas de alta complejidad, Ortopedia, prótesis de rodilla y artroscopías, Cardiología (implante de Marcapasos, Coronariografías, Angioplastía, implante de Stent, implante de TAVI, desoclusión de lesiones crónicas).
“Por lo anterior y a partir de la fecha los médicos dejaremos de proporcionar la atención que corresponda al tercer nivel, lo que ocasionará, aumento en los envíos y traslados a ese nivel para su atención, conllevando a un aumento en el gasto en el consumo de gasolina, pago de honorarios extraordinarios al personal que los realiza y lo más importante el descontento por parte de los derechohabientes, que tendrán que esperar la aceptación de los hospitales de TERCER NIVEL para su atención, lo que motivará aumento en la morbimortalidad y la decisión, por parte de los derechohabientes, de altas voluntarias para su atención en el medio privado, con el consecuente aumento de demandas para el médico y la Institución, al reclamar el cobro de la atención médica privada”.
Médicos solicitaron así la intervención de la dirección general para que el Departamento encargado de la clasificación de Hospitales, se avoque al estudio de factibilidad, para contar con un hospital de tercer nivel, ya que existe una necesidad imperiosa que se asegure una atención médica adecuada “con la calidad y calidez que se merecen los pacientes”.
Médicos también exhiben hostigamiento laboral
Desde la segunda quincena del mes de septiembre de este año el personal médico ha trabajado bajo hostigamiento y acoso laboral por parte del personal de confianza directivo, según indicaron impuesto por autoridades desde nivel central y/o por la encargada o responsable provisional de la Delegación Estatal del ISSSTE Alicia Quezada Lara, como lo son: la Directora, la Administradora y la Jefa de Personal.
Aseguraron que hasta la actualidad es solamente la responsable de la Delegación Estatal de San Luis Potosí, sin embargo, ha actuado con gran prepotencia, “tomando decisiones que pareciera fuera ya la delegada figura que ha desaparecido ya”.
La subdirectora administrativa Karen Alejandra Chávez Cossío, también la señalaron por que ha tomado una actitud prepotente y desafiante hacia el gremio médico, al imponer una serie de medidas fuera de contexto y solamente locales, pasando por alto las normas del ISSSTE y la existencia de acuerdos a nivel nacional.
“Hacemos de su conocimiento que el nombramiento de esta persona nos es difícil entenderlo y por lo tanto aceptarlo, ya que ella tiene formación profesional en licenciatura en comercio y negocios internacionales, por lo que a nuestro entender no tiene perfil y mucho menos experiencia en el manejo adecuado de una Institución Hospitalaria”.
Aparte sobre Rebeca Hernández Jiménez, directora del Hospital General de San Luis Potosí, quien a pesar de ser trabajadora de base, afirmaron que la autoridad violentó, incumplió y pasó por alto lo señalado en internas por lo que impugnaron su nombramiento.
En cuanto a la Jefa del Departamento de Personal Érika Liliana Sierra Ramos, según la información de la que se han allegado, es que en la anterior clínica tuvo problemas con el personal, así como con el Delegado Sindical de ese centro de trabajo.
“Las cuatro funcionarias se han confabulado con el actual Subdelegado Médico, Carlos Saucedo Carrasco, para, con su anuencia aplicar en forma unilateral e irracional el Artículo 46 de las Condiciones Generales de Trabajo del ISSSTE, en lo referente a conceder al personal una tolerancia de diez minutos después de la hora fijada para presentarse a sus labores, no tomando en cuenta el resto del contenido mencionado en el mismo artículo”.
También han emprendido la supervisión selectiva al personal médico del turno matutino, ya que en el turno vespertino no realizan dicha supervisión, lo anteriormente mencionado se podría catalogar como acoso laboral y hostigamiento discriminatorio hacia el personal médico del turno matutino.
Por lo que piden su destitución, además de la solución a estas demandas, ya que de no existir la solución se tomarán otras conductas de acuerdo a lo permitido en las leyes laborales, según advirtieron. De acuerdo a cifras oficiales existen aproximadamente 298,796 derechohabientes en todo el Estado de San Luis Potosí, para ser atendidos por 1,538 trabajadores, de los cuales, en el Hospital General, son 114 Médicos y cerca 270 Enfermeras.