La legislatura saliente rebajó la política, al protagonizar una serie de desatinos y vergüenzas, sentenció Juan Mario Solís, politólogo y catedrático de la UASLP, al hacer una evaluación del desempeño de los diputados locales y agregó que esto se refleja en la polarización y el descrédito ante la población. El catedrático advirtió que aún y cuando los diputados decidieron rendir su último informe a escondidas por temor a los reclamos y manifestaciones, la ciudadanía ya les ha pasado la factura, el pasado 1 de julio, cuando con base en la esperanza de que los que vengan sean mejores, decidieron votar y llevar a otro partido al Congreso del Estado. Sobre esta decisión de los diputados locales de adelantar el informe y hacerlo a escondidas, el politólogo dijo que es muestra de que los políticos tienen miedo, de que les falta colmillo y piel más dura para aguantar el escrutinio público que acompaña al cargo. Señaló que en la función pública la profesionalización va en mula, ante las resistencias de quienes ocupan los cargos y destacó, que salvo alguna excepción, eso fue lo que se mostró en el Congreso, falta de profesionalismo. Aparte el vocero de Ciudadanos Observando Guadalupe González señaló que son los propios diputados quienes se ponen el último clavo al ataúd, porque descartó que luego de esta legislatura alguien pueda darles trabajo, además aseguró que las protestas seguirán este viernes. “Aunque ellos se hayan ido el día de hoy, se cambiará la fecha para el viernes y ahora vamos a exigir a la Fiscalía que vaya a fondo con las denuncias de corrupción que hay de estos sátrapas”. Cuestionó el contenido de lo que pudieron haber informado por esa razón es que habría durado tan poco tiempo el informe aun a pesar del repudio ciudadano. Con la nueva legislatura señaló que harán fuerte presión y evitar que haya habido acuerdos previos con otras fuerzas para detener las denuncias, porque consideró no debe quedar impune.