Tras la declaración del diputado Rubén Guajardo Barrera, de votar en contra de la propuesta de legalizar los matrimonios igualitarios, para posteriormente tratar de convencer a los demás legisladores de respaldar la postura del PAN, activistas defensores de derechos humanos consideraron su postura como un acto de discriminación e carente de información. Paul Ibarra, líder de la Red Diversificadores Sociales, comentó que es necesario tomar en cuenta que el votar en contra es un desacato a una orden de la Suprema Corte de Justica, destacó que es importante que exista una postura de los organismos defensores de Derechos Humanos (CNDH). “No puede ser que a estas alturas todavía tengamos tantas personas al interior del congreso ignorantes de situaciones tan claras como los son cuatro jurisprudencias de la corte desde el año 2015’’. Andrés Costilla, presidente Amigos Potosinos en Lucha contra el SIDA, expresó que las expresiones del diputado constituyen un acto de discriminación, pues agregó que en San Luis Potosí, la discriminación es tipificada como un delito. “Los diputados aun cuentan con fuero, sin embargo, cuando se atenta contra los derechos humanos se anula el fuero, pues puede constituir un juicio federal por desacato a la justicia federal’’.