Como parte del trabajo realizado para la homologación de los sistemas de emergencias, se incorporó por primera vez la perspectiva de género a los servicios de atención telefónica 9-1-1, a fin de atender y prevenir todas las formas de violencia que afectan a las mujeres, garantizando la inmediatez en la atención de emergencias, asesoramiento, fomento la cultura de la denuncia, con lo que se busca además evitar la naturalización del problema.

Anabel Miranda Moctezuma, titular del Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Computo (C4), comentó que a la fecha el 60% de las llamadas que registra el Sistema de Emergencia 9-1-1 están relacionadas con violencia de género y personas en situación de vulnerabilidad.

La Unidad Especializada en la Atención para la Violencia contra las Mujeres y de Género entró en marcha en el mes de julio del presente año y opera las 24 horas del día todo el año, registrando a la fecha 526 seguimientos de llamadas telefónicas por concepto de violencia familiar.

De este tipo de llamadas de emergencia, 122 fueron canalizadas para su atención integral ya que presentaban un factor de riesgo para la víctima por lo que 85 fueron derivadas al Centro de Justicia para Mujeres, 19 a la Procuraduría de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (PPNNA) del DIF, 4 al DIF Estatal, 8 al DIF del municipio de Soledad de Graciano Sánchez, 3 a la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas y uno al Instituto de las Mujeres del Estado, en tanto que 404 corresponden a asesorías jurídicas y psicológicas brindadas por el personal de la Unidad.

Las y los operadores del Sistema de Emergencia 9-1-1, de acuerdo a la mística nacional han sido capacitados para atender las llamadas con calidad, calidez y acompañamiento al usuario y sumado a ello las llamadas son atendidas por personal especializado en perspectiva de género y enfoque especial diferenciado capacitado para detectar los tipos y modalidades de violencia, lo que permite medir el grado de riesgo en el que se encuentra la víctima.

Tal es el caso reciente de una mujer que llamó al Sistema de Emergencias 9-1-1 manifestando que se encontraba fuera de su domicilio acompañada de sus hijos menores de edad, debido a que su esposo la había agredido y amenazado con un arma blanca, por lo que se activó el protocolo específico para ponerla en inmediato conocimiento a Fuerza Metropolitana Estatal quien acudió a su domicilio, resguardándola junto con sus hijos; ya a salvo, la Unidad Especializada en la Atención para la Violencia contra las Mujeres y de Género canalizó su caso al Centro de Justicia para las Mujeres quien a la mañana siguiente dio acompañamiento a la víctima para que presentará la querella correspondiente.

Otro caso se registró mediante una Denuncia Anónima al 089, en donde una mujer alertó que una vecina era agredida constantemente por su pareja por lo que ofreció su propio teléfono celular para contactar a la víctima de violencia, ante lo anterior el personal especializado del 9-1-1 le dio seguimiento durante dos semanas para concientizarla del riesgo en el que se encontraba, una vez enterada de sus derechos manifestó su voluntad para recibir atención integral, canalizando su caso al Centro de Justicia para las Mujeres.

Ante los crecientes casos que se registran en el Sistema de Emergencias 9-1-1, esta Unidad permite garantizar el acceso a una atención especializada a este segmento de la población potosina que requiere de una respuesta eficaz, contribuyendo a la prevención y atención de este tipo de violencia.