El problema de los bajos salarios y la falta de protección laboral en México se debe en gran medida a la alta proporción de empleo informal y no a la existencia del outsourcing, por lo que se debe hacer un esfuerzo en México por avanzar en la formalización del empleo, recomendó en entrevista Jonas Prising presidente de ManpowerGroup. Expuso que existe una falsa percepción de que las empresas de outsourcing operan con una intención de eliminar prestaciones sociales a los trabajadores, al afirmar que hay compañías serias que necesitan atraer empleados con las habilidades adecuadas y tienen que pagarles de manera justa, pagar sus impuestos y la seguridad social. Creo que es una discusión común de que el mundo debería estar conformado con empleos permanentes y estables, pero hoy en día el mundo cambió, México ha sido parte del TLCAN por cerca de 24 años y ha habido enormes beneficios del comercio mundial pero con ello y la fortaleza del sector manufacturero forzó a México a hacerse también una nación más competitiva y crear las habilidades de los trabajadores que le permitan competir y esto da a las empresas la oportunidad de generar empleos . Esta flexibilidad estratégica en la economía brinda mayores oportunidades de crecimiento, no menos. “Si me preguntan, creo que las mayores dificultades del mercado de trabajo en México se deben por tener una gran cantidad de la fuerza laboral en el mercado informal en donde no se tiene ninguna protección, nadie paga seguro social, los salarios son extremadamente bajos, no hay protección laboral y ahí es donde mucho del esfuerzo se debe hacer para que los trabajadores puedan tener una mejor vida”, enfatizó Prising. Reconoció que México no es ajeno a una tendencia mundial en donde se observa una destrucción de empleos con salarios más altos, pero dijo que ello está ocurriendo en actividades y sectores que están dejando de ser relevantes, porque hay ámbitos nuevos, que están generando plazas mejor pagados. Jonas sugirió a los trabajadores de México que quieran elevar sus salarios mantenerse aprendiendo y capacitando durante toda su vida laboral, para así poder migrar a los sectores de innovación y con mayor demanda de trabajo. Expuso que existe una alta correlación entre el nivel de calificación requerida de la mano de obra y el de salarios. Los empleos que requieren poca calificación tienen salarios bajos y los que demandan una alta calificación pagan sueldos elevados. Entonces la ventaja competitiva como país depende de la habilidad para desarrollar mano de obra calificada, finalizó. -- EXCELSIOR