Vínculo copiado
En la medida que la sociedad apuesta a una persona, por más honorable que sea, en tratándose del interés público, la debilidad de la exigencia social se debilita. No son las personas en lo individual o, en grupo de poder, quienes solucionarán las inconformidades de los mexicanos.
23:43 miércoles 8 noviembre, 2017
ColaboradoresEl ejercicio de buscar poder acumulativo como alternativa es sensación de plenitud artificial hoy y, autodestrucción mañana. Papa Francisco.
En la medida que la sociedad apuesta a una persona, por más honorable que sea, en tratándose del interés público, la debilidad de la exigencia social se debilita. No son las personas en lo individual o, en grupo de poder, quienes solucionarán las inconformidades de los mexicanos. Un sistema político que está totalmente rebasado, no puede ser ninguna garantía en la persecución libertaria para que muera la impunidad y en consecuencia de lograr la regeneración de la sociedad. Nuestras vidas, obligadamente , gira en torno de la convivencia con los demás. Así lo describía Aristóteles, refiriéndose a los seres humanos como indefectiblemente sociales. Lo mismo, nadie tiene valor intrínseco, si no es en relación a los demás, igualmente nada de nuestra actividad tiene razón, si no se cristaliza en el servicio para quienes lo solicitan. En nuestro Estado, se ha elegido el Fiscal General, ello ha hecho que se viertan cualquier numero de comentarios en pro y, en contra. Pronto se elegirá al Auditor Superior del Estado, hombre o mujer y, seguro será, los comentarios estarán en todos lados, igual unos en contra y otros a favor, no importa que o porque, habrá que decir algo y, entre más adornado, mejor. En nuestra sociedad, con mucha frecuencia perdemos el horizonte y fundamento de nuestra relación gregaria. Es increíble que después de muchos años de historia que hemos confiado en que una persona, pueda hacer que nuestra República, Estado o, Municipio, sean prósperos, pero que, invariablemente han defraudado la confianza depositada y, así, entremos en controversias de quién o quiénes, serán los buenos. Lo hemos comentado en muchas ocasiones; nuestro sistema político, pero también, el Economico, están superados, obsoletos, rebasados, ya no nos sirven. Los fundamentos legales hechos por los mismos que se han enriquecido a costa del dinero público y que jamás ha dado lo mejor del resultado que se busca, habían y lo siguen haciendo, dejando huecos legales que son usado a ultranza por los corruptos y así librar la justicia. México tiene que refundar sus estructuras, el mismo País lo tiene que hacer pero, no en razón de una o varias personas; es la sociedad que, una vez organizada y firme en la persecución del bien común, tiene que demandarlo. San Luis Potosí, ha dado muestra de librar esta batalla que combate la corrupción y que, aún es vigente y recientemente nuestra sociedad ha dado muestras de ello. Nunca han faltado los protagonismos individuales, odiosos por cierto, los mismos que alimentados desde el poder político, en muchas ocaciones, defenestran las consistencias sociales en sus legítimas aspiraciones para que, de una vez por todas, avance esta lucha en contra de nuestros males y se entienda quienes queremos ser los dueños del destino que deseamos, los que mandan y, quienes los mandatarios. El valor de la opinión pública es enorme. Organizada y firme, tiene el poder de remover a quienes no nos sirvan con honestidad y transparencia. Es en la sociedad en donde debe estar el poder de cambiar las cosas que no nos agradan. La historia así lo demuestra. Nunca el beneficio de los pueblos ha sido por la voluntad de quienes gobiernan. ¿Para qué, entonces enfrentarnos por nombramientos que deben estar sujetos al ordenamiento de los intereses de mayoría? La revocación de mandato es impostergable, la elaboración de iniciativas de ley para hacerlo realidad, va tarde. @jaimechalita