LEÓN, GUANAJUATO.- El ruido de estas máquinas, que producen zapato y todo lo relacionado con la piel, se quedaron en silencio. La crisis del Covid-19 obligó a los dueños de fábricas y talleres a frenar la producción, con todas las consecuencias económicas que esto implica para cientos de familias leonesas que viven de esta actividad. "Todo lo que es esta semana y la anterior hemos estado parados, hasta ahorita a la gente le hemos pagado, por ejemplo esta semana se les pagó completa, sus vacaciones… pero si la situación persiste pues también nos vamos a ver limitados con la gente", explicó Francisco Muñoz, fabricante de zapatos.

La industria de la piel y del calzado sigue siendo la principal actividad económica de la ciudad de León; la mayoría de las fábricas pararon al 100 por ciento y la incertidumbre genera un panorama desalentador. “Yo me siento de repente desmotivado, de repente me siento triste, yo no le veo pronto, no visualizo algo bueno pero empezamos a hacer ya ofertas, bajamos precios”, manifestó Alejandro López, fabricante de bolsa.

Si esta situación se prolonga, los pequeños empresarios estarían en severas dificultades y sus trabajadores se quedarían sin empleo. “Yo creo que la mayoría de las empresas no pueden aguantar más de un mes, mes y medio, realmente porque ya más tiempo si se complicaría la situación", precisó Francisco Muñoz.

A tres semanas de que se frenó la producción, líderes empresariales de la región estiman una afectación económica de 2 mil millones de pesos. "Y un golpe de estos, puede acabar con una parte muy importante de la industria formal de México, que son muchas pymes, mipymes", expresó Luis Gerardo González, presidente de la Cámara del Calzado Guanajuato.

A nivel nacional existen cerca de 10 mil fábricas y pequeños talleres que dependen de esta actividad. -- DINERO EN IMAGEN

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