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Los fiscales que trabajan para Mueller en los últimos meses han interrogado a numerosos funcionarios de la Casa Blanca
15:31 jueves 1 febrero, 2018
MundoWashington DC, Estados Unidos.- El Fiscal especial Robert Mueller indaga los detalles de la respuesta con que la Administración de Trump justificó la reunión que su equipo de campaña tuvo en Nueva York con rusos en 2016. El equipo, que investiga la injerencia del Kremlin en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, notificó a los abogados de Trump que la declaración redactada en el avión presidencial, el Air Force One, es una de una docena de temas que quieren discutir en una entrevista cara a cara con el Mandatario. En lugar de reconocer que el propósito de la reunión era obtener información dañina sobre Hillary Clinton -como después se reveló- la Administración aseguró que el encuentro era sólo para hablar sobre una política de adopción de niños rusos en Estados Unidos. Los fiscales que trabajan para Mueller en los últimos meses han interrogado a numerosos funcionarios de la Casa Blanca sobre cómo se produjo la liberación del mensaje y sobre cuán directamente Trump supervisó el proceso. Algunos de los asesores de Trump argumentan que Mueller no tiene motivos para preguntar al Presidente sobre la declaración, pues no es un delito mentirle a los medios. El mensaje fue lanzada luego de que The New York Times revelara la reunión que Donald Trump Jr., el yerno y asesor del Presidente, Jared Kushner y su jefe de campaña, Paul Manafort, tuvieron con personas relacionadas con el Kremlin en 2016 en la Torre Trump. Los funcionarios de la campaña contactaron a abogado ruso que prometió información perjudicial sobre la rival, Hillary Clinton. En un correo electrónico al hijo del presidente, se mencionó que la información era parte del esfuerzo de Rusia para ayudar a la campaña de Trump. El último testigo al que se llamó para una entrevista sobre la redacción de la respuesta fue Mark Corallo, quien se desempeñó como portavoz del equipo legal de Trump antes de renunciar en julio. De acuerdo con las fuentes, Corallo planea contarle a los investigadores sobre una conferencia telefónica no revelada previamente con el Trump y Hope Hicks, directora de comunicaciones de la Casa Blanca. En ella, según el ex vocero, Hicks dijo que nunca saldrían a la luz los correos electrónicos en los que Donald Trump Jr. dijo estar ansioso por recibir la información dañina sobre Clinton. Eso dejó a Corallo con la preocupación de que Hicks podría estar contemplando obstruir la justicia, según las fuentes. En una declaración el miércoles, un abogado de Hicks negó las declaraciones. "Ella nunca dijo eso. Y la idea de que Hope Hicks alguna vez sugirió que los correos electrónicos u otros documentos serían ocultados o destruidos es completamente falsa" señaló el abogado, Robert P. Trout.
-- REFORMA