La pena de muerte para las personas acusadas de feminicidio es jurídicamente inviable, toda vez que, con las reformas constitucionales y los contenidos de tratados internacionales, se determinó la abolición de este castigo, dijo el presidente del Supremo Tribunal de Justicia (STJ) del estado, Juan Paulo Almazán Cué. Comentó que son hechos lamentables y que no deben ocurrir, sin embargo el sistema jurídico mexicano está sujeto a la Corte Interamericana de Derechos Humanos en donde esta abolido el tema de la pena capital.  “Es un tema que no se puede ni discutir, ni dirimir, porque constitucionalmente hablando no es permitido no es posible”. El presidente del Supremo Tribunal de Justicia, Juan Paulo Almazán Cué, señaló que la muerte de mujeres por medios violentos es un tema que no debe ocurrir, además dijo que duele como sociedad que se den estos casos en la entidad.