Un juez federal del Estado de México emitió una orden de aprehensión en contra de Guillermo Álvarez Cuevas, presidente de la Cooperativa La Cruz Azul S.C.L y Club Cruz Azul, entre otros directivos y asesores de la cementera, lo que pone en riesgo de desafiliación al equipo de futbol de la Liga MX. La orden fue emitida porque se le señala como presunto autor de delitos de delincuencia organizada, así como de realizar operaciones con recursos de procedencia ilícita, según revelaron funcionarios federales a Milenio, de manera que Billy Álvarez deberá ser presentado ante Iván Zeferín Hernández, juez de control del Centro de Justicia Penal Federal de Almoloya de Juárez, con sede en el Penal del Altiplano. Las otras personas que también tienen orden de aprehensión son el ex director jurídico de la Cooperativa y el club de futbol, Víctor Manuel Garcés; el director financiero, Mario Sánchez Álvarez, quienes habrían ayudado a desviar recursos de la Cooperativa y dar una apariencia de licitud a las operaciones al menos durante los últimos seis años. También han girado orden de aprehensión contra Ángel Martín Junquera Sepúlveda, al que la Fiscalía General de la República considera como “asesor jurídico externo de la Cooperativa", que presuntamente se encargaba de diseñar y coordinar el esquema de EFOS (Empresas Fantasmas) que fue utilizado para el desvío de recursos mediante la facturación de servicios inexistentes, causando un perjuicio financiero a la Cooperativa por varios cientos de millones de pesos. Fuentes cercanas a la defensa de Billy Álvarez aseguraron a Mediotiempo que esta no es la primera orden de aprehensión que recibe el directivo, y que esperan que, como las anteriores, esta tampoco proceda. De cualquier modo, en esta ocasión la FGR habría contado con ocho testigos clave para develar las operaciones ilícitas de Billy Álvarez, varios de ellos con posiciones administrativas en la Cooperativa. En particular, la solicitud de orden de aprehensión de la FGR, sin mencionarlo expresamente, da a entender que Alfredo Álvarez, hermano de Billy, fue clave para desmenuzar el esquema de ilícitos, ya que le habían dado el “criterio de oportunidad” como testigo colaborador, según El Universal. Los delitos a los que a todos se acusan dan lugar a prisión preventiva oficiosa. De encontrárseles culpables, las penas hacia Billy Álvarez irían de los 20 a los 40 años de cárcel, mientras que para el resto serían de entre 10 y 20 años, solo por el delito de delincuencia organizada. En caso de que se concrete la orden de aprehensión, Cruz Azul estaría en riesgo de ser desafilado, ya que la Liga MX establece en sus estatutos que un afiliado a la Federación Mexicana de Futbol puede ser desafilado si sus dueños o directivos incurren en actos delictivos o de dudosa reputación. La Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda denunció a fines de mayo a Billy Álvarez por los mismos delitos que incluye la orden de aprehensión, por lo que desde aquella ocasión congelaron cuentas de la cementera. Esa investigación derivó en la colaboración incluso de autoridades estadounidenses, como el Departamento del Tesoro, ya que los señalados habrían realizado movimientos a ese país –donde Guillermo Álvarez habría adquirido seis inmuebles-, así como a España, por más de 1,200 millones de pesos. De acuerdo a Milenio, la tesorera de la Cooperativa, María Alejandra "N", solicitó hace unas semanas la aplicación de un criterio de oportunidad para ser testigo colaborador en la investigación contra Billy Álvarez, y a cambio ofreció entregar copias de las facturas pagadas a empresas fantasmas y los nombres de las compañías.

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Mediotiempo