El Torneo Clausura 2020 ha generado más dudas que certezas, para Necaxa. La salida de Guillermo Vázquez de la dirección técnica, representó un golpe duro para la confianza y credibilidad en el proyecto rojiblanco.  Ernesto y Santiago Tinajero, dueños del equipo de Aguascalientes, decidieron confiar de nueva cuenta en Alfonso Sosa, para guiar el destino de Los Rayos, luego de su anterior etapa, en la cual ascendió al equipo al máximo circuito en 2016, los llevó a las semifinales uma dde aquel Apertura. Dicen que segundas partes nunca fueron buenas y esto puede comprobarse en la dinámica actual que presenta Necaxa, pues tras diez partidos disputados solamente han sido capaces de ganar tres de ellos, empatar dos, perder cinco juegos, para contar con un total de once puntos, mismos que los ubican en el lugar catorce de la tabla. De esta manera, Sosa se encuentra sólo a dos partidos de igualar la marca de siete caídas, que ostenta Marcelo Michel Leaño, timonel rojiblanco en el Clausura 2018.  En la Fecha 13, el Necaxa perdió en casa ante León y la directiva tomó la decisión de cesar a Leaño. Hasta ese momento Leaño había cosechado 12 puntos, uno más de los que suma hoy Poncho Sosa. En aquel torneo la cuerda se rompió tras esa séptima derrota y le año fue destituido con lo cual, el actual estratega necaxista, se acerca peligrosamente a esa racha, y el riesgo de perder puesto está latente. Después del parón por la emergencia sanitaria del COVID-19, Necaxa tendrá que jugar 7 partidos de los cuales deberá ganar al menos seis de ellos sí pretende seguir con aspiraciones de calificar a la liguilla, una tarea sumamente complicada debido a la fragilidad defensiva que ha presentado el equipo durante el campeonato sumado a la irregularidad del plantel. 

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Excelsior