La invitación de Andrés Manuel López Obrador al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, es una “provocación”, una “grave ofensa” y una “falta de respeto” a los pueblos mexicano y venezolano, e incluso el mandatario bolivariano podría ser detenido en México por delitos de lesa humanidad y de corrupción. Opositores al régimen chavista de Nicolás Maduro declararon a El Financiero que el mensaje que envía el Presidente electo de México con esta invitación es que le tiene sin cuidado la crisis humanitaria que vive Venezuela y las violaciones masivas a los derechos humanos en aquel país. Miguel Ángel Martín Tortabu, presidente del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ) en el exilio, informó que el pasado 29 de octubre este órgano envió una notificación a AMLO para que retire la invitación al presidente venezolano por “constituir una ofensa al pueblo venezolano y a los países que lo acusan ante la Corte Penal Internacional (CPI)”. El juez venezolano puntualizó que también notificaron a López Obrador que el TSJ en el exilio ya solicitó a la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) “que detenga a Nicolás Maduro Moros al ingresar a cualquiera de los 192 países donde opera esta organización”, incluyendo México. “El daño que Maduro ha causado a Venezuela es incalculable, mientras que los fondos sustraídos ilegalmente del erario público, sólo en el caso de Odebrecht, alcanzan la cantidad de 35 millones de dólares; como consecuencia, los venezolanos sufren hoy hambre y enfermedades, viéndose muchos de ellos obligados a emigrar, incluso a México”, señaló Martín Totabu. Para Antonio Ledezma, el popular exalcalde opositor de Caracas, exiliado en España, expuso que no es casual que presidentes como Sebastián Piñera, de Chile; Mauricio Macri, de Argentina; Martín Alberto Vizcarra, de Perú; Iván Duque Márquez, de Colombia, no hayan invitado a Maduro a sus tomas de protesta, como tampoco lo hicieron a la última Cumbre de las Américas, que se realizó en abril en Lima, Perú. “Ese punto tiene que estar a consideración de todos los mexicanos, porque en Venezuela impera una narcotiranía que causa un colapso económico y una catástrofe humanitaria”, enfatizó Ledezma. Comentó que apenas el 30 de octubre tuvo un encuentro con el futuro canciller de México, Marcelo Ebrard, en donde le pidió “no olvidarse de Venezuela, que padece una tragedia terrible como consecuencia del populismo de Maduro”. José Manuel Olivares, diputado de la Asamblea Nacional de Venezuela, dijo que la visita de Nicolás Maduro a México para la toma de posesión de López Obrador manda un mensaje “equivocado” a nivel internacional. Sobre la invitación que hiciera el futuro canciller mexicano Marcelo Ebrard a Nicolás Maduro, señaló: “No quiero pensar que es una confirmación del apoyo irrestricto que daría el nuevo gobierno de México a Nicolás Maduro, no quiero pensar que el gobierno de México va a ser copartícipe o va a apoyar la crisis humanitaria, de derechos humanos, la tortura, el asesinato de disidentes, la falta de libertad de expresión y todo lo que ocurre en Venezuela, y mucho peor que el presidente Obrador vaya a tomar el mismo camino para México… creo que sus instituciones y los ciudadanos no lo permitirían”. El Financiero buscó la opinión de los opositores venezolanos Henrique Capriles, Leopoldo López (en prisión domiciliaria) y Lilian Tintori, pero optaron por no conceder entrevistas por posibles represalias del régimen de Maduro. --

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