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Aliados del Fiscal General de EU piden una salida digna para el funcionario al considerar que podrían despedirlo tras los próximos comicios
07:02 lunes 29 octubre, 2018
MundoAl darse cuenta de que los días de Jeff Sessions en el Departamento de Justicia pueden estar contados, algunos de sus partidarios buscan que la Casa Blanca permita una salida digna para un Fiscal General que creen que ha cumplido debidamente la agenda de la Administración, incluso mientras soporta la furia del Presidente Donald Trump. Sin embargo, parece poco probable que los esfuerzos para suavizar el posible despido de Sessions después de las elecciones intermedias del 6 de noviembre encuentren simpatía en la Casa Blanca, donde la ira del Mandatario no ha disminuido por el rechazo del Fiscal General a dirigir la investigación sobre Rusia. Lo anterior deriva de que un sucesor cuidadosamente seleccionado podría, en teoría, supervisar el resto de la investigación en lugar del Vicefiscal General, Rod Rosenstein. Pero algunos simpatizantes del Sessions aseguran que si se reemplaza al Fiscal General, su historial como senador y al frente del Departamento de Justicia será reconocido y no se vería afectado por los ataques del Presidente, o que la Administración al menos respetará la dependencia garantizando una transición sin problemas. Un escenario propuesto por al menos un aliado de Sesiones, el ex alcalde de Cincinnati Ken Blackwell, le permitiría permanecer en el puesto hasta enero y permitir que renuncie por su cuenta en lugar de ser despedido inmediatamente después de los comicios parciales. Blackwell aseguró que los aliados han defendido a los funcionarios de la Administración que el Fiscal ha impulsado con éxito las prioridades centrales del Presidente, incluida la migración ilegal, por lo que merece algún tipo de reconocimiento por parte de la Casa Blanca de que tiene más de una calificación aprobatoria. "No es desconocido, desde John Kelly hasta Jared Kushner, que existe una base de apoyo", señaló el aliado de Sessions al referirse al jefe de personal y al yerno del Presidente. "Una parte de esa base está lista para continuar abogando por su servicio", añadió. Newt Gingrich, un ex orador de la Cámara de Representantes Republicano cercano a la Casa Blanca y que se hace llamar un admirador del Fiscal General durante mucho tiempo, afirmó que estaría abierto a servir como intermediario entre la el Presidente y los partidarios de las Sessions. "Merece una salida digna. Su carrera merece una conclusión sólida", indicó Gingrich, quien calificó a Sessions de un conservador fuerte que ha hecho un gran trabajo en el Departamento de Justicia. En tanto, Sessions, quien ha reconocido públicamente el descontento del Mandatario, ha seguido adelante con los deberes convencionales del trabajo, incluido un calendario regular de eventos y anuncios. Mientras, aunque Donald Trump es consciente de que el Fiscal General sigue siendo popular entre gran parte de su base, parece poco probable que firme un plan para extender su tiempo en el cargo, según un funcionario de la Casa Blanca y un asesor externo familiarizado con los planes del Presidente. El Mandatario ha señalado repetidamente los rumores del posible despido antes de noviembre y ha manifestado a los aliados que desea hacer cambios radicales en el Departamento de Justicia una vez que concluyan las elecciones intermedias. --
REFORMA