CIUDAD DE MÉXICO.- A mes y medio de que asuma el cargo como presidente constitucional de México, Andrés Manuel López Obrador, reveló que pidió a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) investigar a los futuros mandos de la Sedena y de la Marina. Cabe recordar que López Obrador propuso a Luis Crecencio Sandoval como próximo secretario de la Defensa Nacional y a José Rafael Ojeda como futuro titular de la Secretaría de Marina. Al recibir este miércoles los resultados de la consulta para la pacificación y la reconciliación nacional en el Archivo General de la Nación, anunció que excarcelará a todos los presos políticos que "de manera injusta" se encuentran privados de la libertad. El presidente electo asumió los ocho primeros compromisos por la paz, dentro de los cuales, destacó la intención que desde el arranque del nuevo gobierno federal no exista en prisión ninguna persona que por motivos políticos sea privada de su libertad. "Quiero desde el inicio de mi gobierno poder dar a conocer un acuerdo, un decreto, el instrumento legal que corresponda para liberar a todos los presos políticos y luchadores sociales que están injustamente encarcelados, esto se lo he pedido a la licenciada Olga Sánchez Cordero porque también es un proceso, hay que analizar caso por caso y que en las cárceles no haya gente injustamente privada de su libertad", resaltó López Obrador al enumerar sus compromisos por la paz.

Al reiterar frente a su futuro gabinete, activistas de la sociedad civil, víctimas del delito, representantes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), así como ante nuncio Apostólico, Franco Copola, que el gobierno de la cuarta transformación "no optará por el exterminio de los seres humanos", López Obrador anunció la creación de un Consejo Nacional por la Paz, el cual servirá para procesar todas las alternativas de solución que ayuden a alcanzar la paz y la tranquilad en el país. En ese sentido, explicó que en dicho consejo estarán representados todos los sectores de la sociedad mexicana y de manera especial, las víctimas del delito, quienes ratificaron en los distintos foros desarrollados la postura que la verdad pasa por la justicia. "Que podamos crear un consejo, esto no debe terminar aquí, tenemos que ir hacia la reconciliación (...) que podamos crear un consejo permanente y que podamos ir resolviendo, a partir de la creación de consensos, escuchándonos todos, sobre todo las víctimas, que nos sigan ayudando las organizaciones de derechos humanos, las iglesias", detalló López Obrador al agradecer al Papa Francisco la decisión de apoyar "a su querido México" en el proceso de paz en el país. El propósito primordial del consejo, precisó López Obrador será encontrar la mejor solución a los problemas generados por la violencia, como el consumo y tráfico de drogas. "Que podamos resolver entre todos temas complejos, que tienen que ver con la política que vamos a aplicar en el combate a las drogas, es un tema que tenemos que analizarlo bien, tenemos una gran ventaja, somos independientes, solo tenemos como amo al pueblo de México, somos libres, vamos a gobernar de manera soberana; es decir, siendo respetuosos de la opinión de otros gobiernos del mundo pero sin subordinarnos a ningún gobierno extranjero, es nuestra decisión; entonces, sin limitaciones, revisar lo que más convenga para que no haya violencia en el país", expuso el presidente electo.

El mismo criterio aplicaría, dijo López Obrador, para el caso de la amnistía, en donde su posición personal consiste en "olvido no, perdón sí". No obstante, aclaró que, como jefe de Estado, está obligado a cumplir con la ley y con lo que exprese la mayoría. "Conciliar justicia con perdón, ser respetuosos (...) a lo mejor como jefe de estado y de gobierno voy actuar escuchando a todos y me voy a someter a la opinión de todos, pero en lo personal sí creo en el perdón", reafirmó López Obrador.

Los otros seis compromisos por la paz de López Obrador consisten tienen que ver con atender las causas de la violencia, profesionalizar a marinos y soldados en el respeto a los derechos humanos, atención permanente a las víctimas, conocer la verdad del caso Ayotzinapa y abrir las puertas del país a los organismos internacionales, como la ONU, para que sean observadores del actuar de su gobierno. Previamente, los futuros secretarios de Gobernación y de Seguridad Pública, Olga Sánchez Cordero y Alfonso Durazo, respectivamente, afirmaron que la realidad de México "es inmensamente dolorosa" porque se está desapareciendo a los jóvenes y a las mujeres y son los familiares de las víctimas y no el Estado, quienes buscan a sus hijos, hijas, esposas o esposos. Ambos se comprometieron a "no más simulación " en materia del respeto a los derechos humanos. Finalmente, Alfonso Durazo reveló que a partir de las conclusiones de los foros se desprende la necesidad de implementar una nueva normatividad respecto al uso de las armas en territorio nacional. "Se requiere nueva norma e institucionalidad, hay que realizar políticas de armas para tres universos: armas en manos de criminales, armas en manos de la sociedad en general y armas en fuerzas oficiales", puntualizó Durazo.

-- EXCÉLSIOR