El Real Madrid consiguió una sufrida victoria por 2-1 sobre el FC Barcelona en el Clásico español correspondiente a la jornada 30 de LaLiga Santander, celebrado en el estadio Alfredo Di Stéfano, el duelo no estuvo exento de la polémica arbitral. Los dirigidos por Zinedine Zidane se adelantaron en el marcador a los 14 minutos tras un contragolpe orquestado por Lucas Vázquez en el costado derecho, el lateral habilitó a Karim Benzema, quien remató de ‘taquito’ para vencer a Ter Stegen y romper el cero. El Barcelona intentó reaccionar de inmediato, pero cuando más peligroso lucía el conjunto azulgrana en el campo, un tiro libre ejecutado por Toni Kroos encontró el desvío en la espalada de Sergiño Dest y la complicidad de Jordi Alba para convertirse en el 2-0 en favor de los merengues. Sobre la recta final de la primera mitad, Lionel Messi estuvo a punto de marcar un gol olímpico, pero su disparo se estrelló en el poste y posteriormente, el francés Ousmane Dembelé sería derribado dentro del área por Ferland Mendy, sin embargo, ni el árbitro ni el VAR sancionaron la jugada. La parte complementaria inició bajo una tormenta, la lluvia y el aire complicaron el trámite del partido y la visibilidad, con un Real Madrid apostando por los contragolpes para sentenciar el partido y un Barcelona que buscaba de manera insistente descontar en el marcador. Fue hasta el minuto 60 cuando el Barcelona consiguió descontar luego de una jugada de Jordi Alba por el sector izquierdo, envió un centro al corazón del área blanca para la aparición de Óscar Mingueza, quien conectó el balón de ‘tres dedos’ para vencer a Courtois. El silbante Jesús Gil Manzano detuvo el partido por casi cinco minutos por problemas con su diadema de comunicación, tiempo que aprovecharon ambos equipos para agotar sus cinco modificaciones reglamentarias. A dos minutos del final, Casemiro recibió dos tarjetas amarillas, la primera por una barrida sobre Messi y la segunda por evitar que Mingueza se internara al área merengue, siendo expulsado justo después de la segunda jugada controvertida del encuentro, cuando Martin Braithwaite le había ganado un balón a Mendy dentro del área y el defensor del Madrid lo contactó provocando su caída, sin embargo, al igual que en la primera mitad, ni el árbitro ni el VAR intervinieron. Luego de las protestas azulgranas porque el árbitro Gil Manzano sólo agregó cuatro minutos, llegó la última acción del duelo, Ilaix Moriba controló un balón dentro del área del Madrid y sacó un potente disparo que se impactó en el travesaño, ahogando el grito de gol y sentenciando así la derrota del conjunto blaugrana. Con este resultado, el Real Madrid se coloca como líder momentáneo, igualando en 66 puntos al Atlético, pero con el resultado directo a su favor; mientras que el Barcelona cae a la tercera plaza al estancarse con 65 unidades.