QUITO.- Las dos personas que fallecieron ayer lunes al caer del tren de aterrizaje de un avión, cuando despegaba del aeropuerto de Guayaquil, eran menores de edad. Ambos eran oriundos de la provincia andina de Cañar, informó este martes el diario oficial El Telégrafo, con base en fuentes oficiales. Las autoridades presumieron inicialmente que los jóvenes podían haber sido de Perú debido a que el vuelo procedía de ese país. De acuerdo a los datos entregados por la Policía del Guayas y publicada por el periódico El Universo, los polizones eran Luis Manuel Ch. P., de 16 años, y Marco Vinicio P. G. de 17 años. Según expertos citados por los medios, los dos menores viajaban a una altitud de 300 metros cuando cayeron del aparato, soportando temperaturas por debajo de los -40 grados centígrados, difíciles para un ser humano. Los familiares, hasta la tarde de este martes, estaban en el Laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses de Guayaquil tramitando el retiro de los cuerpos. Para identificar a las víctimas se revisaron los reportes de personas desaparecidas y se descubrió que, en El Tambo, en Cañar, un ciudadano denunció el domingo la desaparición de su hijo y el primo de este, ambos menores de edad. La compañía Latam, que operaba el vuelo, lamentó el suceso a través de su cuenta de Twitter y aseguró que los dos fallecidos no se encontraban a bordo, no eran pasajeros. El suceso se registró en la mañana de ayer, cuando un avión procedente de Lima y con destino a Nueva York tuvo que volver a aterrizar en el aeropuerto José Joaquín de Olmedo, de la ciudad costera de Guayaquil, tras detectarse que tres bultos se habían desprendido del tren de aterrizaje: dos personas y una maleta. -- EXCÉLSIOR