Los golpes entre familia durante el fin de año se han vuelto parte de las costumbres navideñas y de fin de año. Tanto que se ven inaugurados casi desde las posadas. Sólo es cuestión de reunir a todos los tíos, tías, primos y a los abuelos para que la celebración termine en una tragicomedia. Es muy común que en estas fechas las familias simulen amor para recibir el nuevo año. Pero todos sabemos que las viejas e insuperables rencillas después del brindis y un par de copitas nos llevan a la tradicional lluvia de madraz*s entre tíos. Que si se pelean porque cuando eran chiquitos uno le pegaba al otro, que si por la herencia de los abuelos, que si uno era el favorito, los temas y motivos para darse de palos, sobran, es por eso que podría considerarse que los golpes entre familia decembrinos vienen a ser tradición. Casi al nivel de los romeritos y el pavo. En esta temporada, las redes sociales son la forma más fácil de desahogarse y sacar a relucir el filo del humor negro. Es por este motivo, que muchos usuarios comparten sus trágicas y cómicas trifulcas familiares que al parecer no respeta ni raza, ni clase, ni género.

Y a continuación…

En esta ocasión, Twitter nos regaló esta joya que decidimos compartir para su deleite, pues dicen que unas buenas carcajadas son la mejor medicina del alma: El usuario @tona_tiuh se volvió famoso este fin de semana por revelar su historia navideña más desastrosa, cuyos ingredientes principales fueron una tía, un esposo trabajando lejos, un amante y un par de abuelos racistas.

Para ese momento, ya habían comenzado los rumores respecto a una posible infidelidad por parte de la tía de Tonatiuh, pero la familia hizo caso omiso para evitar especulaciones. Ya cercana la época navideña, la abuela del joven los invitó a la tradicional cena y le explicó a su madre que “el tío güero” no asistiría pues en ese momento se encontraba en Nicaragua. Más tarde, justo el 24 de diciembre, mientras los primos platicaban y reían en la mesa, el “tío güero” de Tonatiuh atravesó la puerta y exclamó “los extrañé mucho”.

En tanto, el rostro de la abuela se tornó pálido y corrió a llamar por teléfono a alguien de manera misteriosa (evidentemente para prevenir a la tía para que no llegara con su otra pareja). Sin embargo, justo en ese momento entró la pareja extramarital y frente a todos, sin notar la presencia del esposo, se besaron. Resulta que la tía de Tonatiuh, no sólo no se sintió avergonzada por la situación en la que se encontraba sino que además, se molestó con su esposo y le gritó “¡Ching… tu ma…, ya ni nos veíamos!”.

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