Washington vuelve a dar la espalda al secesionismo catalán. La Administración de Donald Trump ha emitido un comunicado al poco de que el Parlamento de Cataluña aprobara la declaración unilateral de independencia para recalcar que respalda la unidad de España y las decisiones del Ejecutivo de Mariano Rajoy. "Cataluña es una parte integral de España, y Estados Unidos apoya las medidas constitucionales del Gobierno español para mantener a España fuerte y unida", ha dicho la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert. Se trata de la misma postura que manifestó en su día la Administración de Barack Obama y que Trump mantuvo desde que llegó a la Casa Blanca el pasado mes de enero. El presidente de EE UU tuvo la oportunidad de explicitarlo, en sus propias palabras, el 26 de septiembre durante la visita de Rajoy a Washington. "Me gustaría ver que España continúa unida”, dijo el republicano en la comparecencia conjunta, celebrada apenas unos días antes del 1-O, el referéndum invalidado por el Tribunal Constitucional. "Creo realmente que la gente de Cataluña seguirá en España. Sería una tontería no hacerlo; estamos hablando de seguir en un país verdaderamente grande, precioso e histórico”, resaltó. En 2015, durante una reunión con el rey Felipe VI, Obama había manifestado también su respaldo a una España unida. “En materia de política exterior, estamos profundamente comprometidos en mantener una relación con una España fuerte y unificada”, dijo el demócrata. En los últimos años la Generalitat ha puesto especial énfasis en Estados Unidos dentro de su campaña por recabar apoyos internacionales a su proceso de secesión, pero se ha encontrado con un portazo institucional. La acogida de conferencias de políticos soberanistas en foros prestigiosos como las universidades de Harvard o Columbia y la buena estrategia de comunicación respecto a la prensa estadounidense no se ha visto acompañada de simpatías por parte de las autoridades. -- EL PAÍS