El jardinero de los Rays de Tampa Bay, Randy Arozarena, expresó su emoción ante la posibilidad de jugar el próximo Clásico Mundial con un elemento de la Selección Mexicana. Arozarena nació en Pinar del Río, Cuba, pero en 2016 decidió dejar su país en una balsa para llegar a Cancún y posteriormente trasladarse a Mérida, en donde siguió con su carrera de beisbol. Luego de jugar con Toros de Tijuana y Mayos de Navojoa fue firmado por los Cardenales de San Luis, equipo con el que debutó en las Grandes Ligas en 2019. Un año después llegó a los Rays de Tampa Bay, en donde ha vivido sus mejores momentos, incluyendo jugar la Serie Mundial de 2020 y ganar el premio como Novato del Año en 2021. A punto de cumplir un nuevo sueño, una nueva meta de la mano de Dios y con el apoyo de mi familia y mucha gente que me quiere”, expresó Arozarena en sus redes sociales. El jardinero de 27 años expresó desde el primer momento su deseo de jugar el Clásico Mundial de 2023 con el equipo de tricolor. En abril del año pasado obtuvo su carta de naturalización y desde ese momento se declaró ser un representante en las Grandes Ligas. Jugar un Clásico Mundial y representar a un país que me ha dado tanto es una gran bendición, mucho éxito a todos mis colegas que jugarán este clásico en sus selecciones, que sea un buen torneo para todos”, escribió el pelotero luego de que se dieron a conocer los rosters de los equipos. El jugador de los Rays es sin duda uno de los jugadores a seguir en la Selección Mexicana, por su poder con el madero y la velocidad en las bases. En su carrera en la Gran Carpa batea para .269 con 48 cuadrangulares y 171 carreras empujadas. Además, suma 58 robos de base y 72 carreras anotadas. En 2022 tuvo su mejor temporada al batear .263 con 20 cuadrangulares y 89 carreras producidas. Pegó un total de 154 jonrones, de los cuales 64 fueron de extrabase. FUENTE: EXCÉLSIOR