El ámbito de la ciberseguridad sigue demandando talento para cubrir 80.000 puestos de trabajo que están relacionados el malware, ransomware, estafas por Internet y otros ataques cibernéticos. Para ello, las empresas han creado el puesto de Cyber Profiling con el objetivo de identificar y analizar actividades criminales. Como respuesta al auge de la ciberdelincuencia, las empresas se están formando cada vez más en ciberseguridad, por ello ha surgido un nuevo puesto de trabajo llamado cyber profiling, que básicamente es un ciberdetective encargado de identificar y analizar actividades criminales para proteger a la compañía. Para afrontar problemas modernos lo que se suele necesitar son soluciones modernas, por ello el auge de ciberataques a empresas ha hecho que muchas de ellas comiencen a buscar maneras de combatirlos y entre las distintas herramientas que tienen, ahora se ha desarrollado un nuevo puesto de trabajo. Cyber Profiling o el perfilamiento cibernético es un nuevo tipo de empleo que cada vez más compañías están buscando. Esta persona tiene como objetivo identificar y analizar las actividades criminales para mantener a la empresa segura de un ciberataque. Funciona como un complemento para las herramientas de seguridad de las que ya disponen muchas compañías como VPNs, cortafuegos, software antivirus y demás. Su trabajo consiste en detectar patrones que pueden ser malignos para la empresa a la vez que examinar un ataque e incluso intervenir en uno para evitar que los daños sean mayores. ¿Cuál es el perfil? Como ya hemos dicho, este puesto de trabajo es muy nuevo y por ahora no hay ningún curso específico que te forme directamente para convertirte en un cyber profiling. Sin embargo, estos profesionales suelen ser graduados en carreras de criminología, psicología y lingüística forense, pero a su vez se les requiere una serie de conocimientos cibernéticos que les permite identificar y combatir los ciberataques. Las labores de los cyber profilings consisten en analizar los patrones de los ciberdelincuentes para ser capaces de detectar e identificar un ciberataque cuando se está produciendo. Gracias a sus conocimientos en psicología criminal, además de los tecnológicos, son capaces de leer los escenarios de una forma más amplia y poder establecer medidas preventivas que sean efectivas. Por último, estas personas también intervienen en los ataques de ransomware (el uso de un programa dañino para "secuestrar datos") con la finalidad de contener el daño del ciberataque. Este nuevo puesto que ha surgido dentro de los equipos de ciberseguridad de las empresas puede suponer una nueva puerta para muchos jóvenes que tienen este tipo de estudios pero que a su vez les apasiona la informática. La posibilidad de combinar un enfoque técnico con metodologías de investigación puede ser la clave para prevenir y detener ciberataques, que tal y como parecen indicar las tendencias no van a hacer otra cosa que multiplicarse de cara al futuro. Con información de Agencias.