El desastroso resultado electoral que se tuvo en los comicios del pasado domingo por parte de la famosa coalición PRI-PAN-PRD -al solo ganar dos gubernaturas de seis en juego- dejó en evidencia varios puntos que sus dirigencias nacionales deben de analizar sin arrogancias y con la sinceridad que su futuro amerita, si es que lo quieren tener.  Por una parte, a nivel nacional la total falta de estrategia política al desaprovechar el gris desempeño del gobierno federal y el partido en el poder en los últimos años y que bien pudieron encaminar para recuperar adeptos socio-electorales que les mejoraran sus resultados. Y aunque “Alito” Moreno y Marko Cortes se excusen diciendo que Morena perdió mas que gano, el mapa político nacional pinta distinto. Se pierde y se gana. Punto. Y la otra. La total falta de conciencia político-electoral de las dirigencias nacionales, estatales y municipales para formar y enviar equipos representativos a trabajar a otros estados el pasado domingo que tuvieran un resultado, de menos, digno de presumir. Y el PAN potosino “se lució”.

Ellas y ellos si presumiéndolo en sus redes sociales. Los representantes de Marko Cortes “Equipo MK” -así lo citaron textual- se dieron a la tarea de trabajar, apoyando al PAN hidalguense, en favor de la coalición que abanderaba a la priista Carolina Viggiano.

A saber: los diputados federales Xavier Azuara y Pepe Toño Meraz, la diputada local Aránzazu Puente, la Presidenta del CDE Verónica Rodríguez, los regidores capitalinos Edgardo Jasso y Maru Castro y el ex sindico capitalino -y hoy funcionario del Interapas- Víctor Saldaña (quien por cierto, y casualmente, en estas fechas electorales presentó una justificante médica para ausentarse de sus labores. Misma que, también casualmente terminó el domingo, acudiendo a laboral ayer lunes) y un puñado de jóvenes panistas. ¿Qué característica en común tienen en su arraigo panista?

No solamente haber representado al “Equipo MK” esta ocasión, sino formar parte del grupo “azuarista” que tiene cooptado al PAN potosino. ¿Qué característica en común tuvieron con su presencia en el proceso electoral hidalguense?.

Que si de resultados hablamos, la derrota fue estrepitosa.

Que si de resultados hablamos, no pudieron controlar ni llevar a triunfo la elección de su candidato en San Luis, Octavio Pedroza, hace un año ¿de verdad esperaban triunfar en otros lares que ni conocen?

Que si de resultados hablamos, si fueron a operar políticamente con estrategias decentes, dense por malos y malas. Y si fueron a querer ganar con artimañas clásicas, dense por más malos y malas. Y a fin de cuentas ni “aluzan” aquí, menos allá. Hasta mañana.