El regreso a las clases presenciales de mas de 730 mil alumnas y alumnos, mas de 70 mil docentes y administrativos en mas de 8 mil 500 centros educativos en todo el estado para los niveles de educación básica, media y superior, representa, de nueva cuenta, un reto para el sistema educativo y los tres niveles de gobierno. Desde los padres de familia, bajo cuya responsabilidad están los menores o también los jóvenes adultos que ya responden por ellos y ellas mismas; desde los administrativos, docentes y directivos; hasta llegar a las autoridades en materia educativa de la mano con sus superiores municipales, estatales y federales, tenemos un gran reto -de nueva cuenta- frente a la presencia constante e inacabable pareciera, del COVID 19. De mucho reconocimiento la labor que en ultimas semanas el gobierno estatal y ahora el gobierno municipal capitalino han logrado, al gestionar campañas masivas de vacunación, tanto para adultos como para jóvenes, en coordinación con el gobierno federal. Pocos serian los pretextos para argumentar una falta de oportunidades de acceso a la vacuna. Ya no caben los reproches contra la autoridad.

Ahí radica en mucho la responsabilidad de los ciudadanos para el cuidado frente a un contagio. Aquí no cabe el señalar a los gobiernos estatales y municipales como promoventes de actividades masivas dentro de los calendarios festivos tradicionales de los últimos días o los que vengan. A nadie se le obliga a lo riesgoso. Seamos sinceros. Se trata de un gesto de responsabilidad y cuidado de cada uno de nosotros y para los nuestros. La actividad económica no puede parar ya.

Tampoco la académica. Las clases a distancia y vía digital no suplen en nada la presencia física en un aula y su aprovechamiento, incluyendo la necesidad que nuestra naturaleza de convivencia nos exige. Hoy regresamos a las aulas. Mañana descubrirán otra variante, esperemos menos peligrosa, pero si mas contagiosa. Y pasado mañana otra. La realidad es la que todos y todas debemos de fortalecer con nuestra propia responsabilidad. Hasta mañana…