Cada tres y cada seis años el llamado a los partidos políticos es el mismo: revisión a detalle de los perfiles que serán propuestos como candidatos. Y a cualquier cargo. Desde quienes aspiran a ser Presidentes de la Republica, hasta Regidores. Pasando por senadores o diputados federales, locales o alcaldes. Desafortunadamente ese exhorto ciudadano les importa nada a los partidos políticos y nos hemos acostumbrado a ver personajes improvisados, ignorantes, irresponsables o, peor todavía, delincuentes. Sorprendidos quedamos cuando revelan luces de inteligencia, responsabilidad o decencia. Pero no es demasiado tarde.  Inscritos han quedos todas y todos los aspirantes a lograr el voto popular para sus sillas o curules y difícil será que los partidos políticos cambien sus cartas, reconociendo la falta de revisión de sus expedientes, en caso de que sean una vergüenza, porque si los hay. Impensable. Ejemplos: en la zona media el PVEM tiene a Oscar Bautista, por decir alguno. No es demasiado tarde. Si por décadas hemos comprobado que, en la mayoría de sus decisiones, a los partidos políticos no les interesa su honra mas que los votos. Que sea a nosotros quienes si velemos por elegir a nuestros representantes basados en sus tarjetas de presentación. Que entonces nos avoquemos a tratar de conocerlos. Sus nombres con lo que ello significa. No solo la cara bonita. No es demasiado tarde, tenemos hasta junio.