Casi 250 años después de declarar su independencia de Gran Bretaña, Estados Unidos podría estar considerando acercarse nuevamente a la corona británica, según sugirió recientemente el presidente Donald Trump. La sorprendente afirmación llega tras conocerse que el rey Carlos III planea extender formalmente una invitación para que Estados Unidos se una a la Mancomunidad de Naciones, también conocida como Commonwealth. La Commonwealth, actualmente formada por 56 países, está integrada en su mayoría por excolonias británicas, incluyendo a Canadá y Australia. Estados Unidos nunca ha formado parte de este grupo voluntario, que simboliza en gran medida la histórica influencia británica. La noticia surgió después de que el medio británico Daily Mail revelara que el rey Carlos III está listo para ofrecerle a Estados Unidos el estatus de "miembro asociado" de la Commonwealth durante la próxima visita de estado del presidente Trump al Reino Unido. Trump no ocultó su entusiasmo por la idea. A través de su plataforma de redes sociales, Truth Social, el mandatario estadunidense publicó: "¡Me encanta el rey Carlos! ¡Me parece genial!". Según el informe, la invitación escrita a mano por el propio monarca fue entregada al presidente Trump por el primer ministro británico, Keir Starmer, durante una reciente visita oficial a la Casa Blanca. Una fuente de la Royal Commonwealth Society afirmó al Daily Mail que la adhesión de Estados Unidos se está "discutiendo al más alto nivel", considerándolo una "decisión maravillosa que simbolizaría la estrecha relación entre Gran Bretaña y Estados Unidos". "La fuente agregó: "Donald Trump ama a Gran Bretaña y tiene un gran respeto por la Familia Real, por lo que creemos que vería los beneficios de esto". ¿Qué podría implicar que EU se sume al Commonwealth?

De concretarse, esta adhesión podría aliviar las tensiones diplomáticas surgidas en los últimos años entre Washington y Ottawa, generadas en parte por las frecuentes declaraciones del presidente Trump respecto a hacer de Canadá el "51.º estado" de Estados Unidos, un comentario que ha irritado profundamente al país vecino. Las relaciones entre Estados Unidos y Canadá han atravesado dificultades recientes, principalmente por disputas comerciales iniciadas por Trump. El mandatario estadunidense ha impuesto aranceles elevados a importaciones canadienses clave, lo que ha provocado irritación en el gobierno y la población canadiense. La posibilidad de que Estados Unidos ingrese a la Commonwealth cambiaría profundamente la dinámica diplomática. Actualmente, Estados Unidos mantiene embajadores en Londres y Ottawa; sin embargo, en caso de sumarse al bloque, estos cargos serían reemplazados por "altos comisionados", que son el equivalente diplomático entre países miembros de la Commonwealth. Esta potencial transformación diplomática no solo tendría implicaciones simbólicas, sino que también podría redefinir las relaciones económicas y comerciales entre estas naciones. Actualmente, la Commonwealth busca fortalecer su papel global en un escenario dominado por grandes bloques económicos y alianzas políticas. La propuesta, sin embargo, aún debe superar múltiples obstáculos políticos y diplomáticos tanto en Estados Unidos como en el Reino Unido. Mientras la Casa Blanca aún no ha emitido comentarios oficiales sobre el reporte, la noticia ya ha comenzado a provocar reacciones variadas en los ámbitos políticos y públicos de ambos lados del Atlántico. De concretarse, Trump sería el primer presidente estadounidense en dar este paso histórico hacia una relación más estrecha con la monarquía británica desde la independencia de 1776. Únete a nuestro canal de WhatsApp para no perderte la información más importante 👉🏽 https://gmnet.vip/7Be3H

Con información de Excélsior.