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López Obrador no puede desmarcarse del millonario atraco ni de las redes que lo consintieron y premiaron. Tampoco la 4T
00:10 lunes 29 septiembre, 2025
ColaboradoresNo es una simple conjetura ni una afirmación al aire. Las evidencias están a la vista de todos: el de AMLO es ya el sexenio más corrupto en la historia de México.
La mayor organización criminal durante el sexenio pasado no fue un cártel del narcotráfico, sino una red conformada por funcionarios de la 4T y sus familiares y socios. Encumbrados por el ex presidente, amigos y cercanos colaboradores a él, crearon el más grande grupo político-empresarial-criminal del que haya registro.
El entramado, que abarca distintas dependencias neurálgicas del gobierno (Marina, Aduanas, Pemex, Seguridad, además de varios gobiernos estatales y empresas), algunos de los integrantes del equipo presidencial más poderoso, y en el que estarían involucrados también familiares y amigos de López Obrador, quedó al descubierto tras una exitosa operación llevada a cabo por el secretario de Seguridad, Omar Gracía Harfuch, en la que participó buena parte del gabinete de Seguridad de la presidenta Sheinbaum que, en los hechos, pintó su raya con su antecesor y las corruptelas que lo envuelven.
Es tal el robo que el millonario desvío desde Segalmex, sucedido durante el sexenio pasado, palidece frente al multimillonario negocio ilícito del huachicol fiscal. La Casa Blanca y la Estafa Maestra de Peña, la Estela de Luz de Calderón y el toallagate de Fox son cosa de niños, frente a lo descarado y obsceno del robo de combustible.
180 mil millones de pesos en 2024, más lo que se acumuló en 2025, hasta que comenzó a ser desmantelada.
Pero como se sabían tan intocables, siguieron operando durante la actual administración, hasta que comenzaron los decomisos históricos: el 28 de marzo, en Ensenada, Baja California (8 millones de litros) y tres días después un buque tanque en Altamira (10 millones de litros más). Y pese al combate, siguieron: 129 carrotanques con 15 millones de litros apenas en julio pasado.
López Obrador no puede desmarcarse del millonario atraco ni de las redes que lo consintieron y premiaron. Tampoco la 4T, que va quedando marcada por el desfalco y la corrupción desde el poder.
Para Sheinbaum es una oportunidad de apartarse de la corrupción. Si lo consigue tendrá el margen de maniobra que tanto necesita ella y su gobierno, sacudiéndose la figura de AMLO. Si se detiene en la senda ya tomada, quedaría atrapada. Lo primero puede significar un parteaguas, pero implica ir por los corruptos que participaron y alimentaron las redes criminales. Y eso implica salpicar (o embarrar) al ex presidente, porque no es creíble que no estuviera al tanto. ¿Qué camino tomará la Presidenta?
Por lo pronto, no hay duda: el sexenio de AMLO ya es el más corrupto en la historia de México.
POR MANUEL LÓPEZ SAN MARTÍN
COLABORADOR
@MLOPEZSANMARTIN