Autoridades de los tres órdenes de gobierno; así como el empresariado han comenzado ha señalar que este próximo fin de año se tendrá la afluencia de visitantes más grande de que se tenga memoria en Puerto Vallarta por lo que se sienten sumamente contentos ante la gran derrama económica que esto representará para el destino turístico. Dicha llegada, servirá para mejorar la economía, la cual se vio sumamente afectada por la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2 y la enfermedad de Covid-19, la cual mantuvo prácticamente estancada la economía durante el 2020 y 2021, dicha parálisis afectó principalmente el sector de los servicios, de los cuales Puerto Vallarta depende en un alto porcentaje. Los pronósticos de llegada masiva hacen que autoridades y empresariado se sientan optimistas de que la economía se reactiva, pese a que sigue existiendo una gran cantidad de vacantes por cubrir en la ciudad, lo cual hará que el servicio no sea el más adecuado a la hora de atender a los cientos de miles de turistas que se esperan, especialmente durante la última semana del 2022. Por otro lado, para nadie es un secreto que los servicios públicos otorgados por los distintos entes de gobierno cada día van empeorando, en algunas colonias pasan días en que el alumbrado público funcione correctamente, esto ha ocurrido incluso en el malecón de la ciudad, en el que hace algunas semanas, al menos seis cuadras del área más visitada de la ciudad lucían prácticamente oscuras, solo eran iluminadas por los negocios del área. Para quienes usan algún automóvil, la situación para nada pinta halagadora, con una buena cantidad de baches en prácticamente todas las vialidades, lo mismo las principales, que las secundarias y no se diga las terciarias aquellas por las que los turistas normalmente no pasan y que son las más destruidas. Aunado a los baches, la falta de estacionamiento cada día se va agravando, al no tener en donde dejar los vehículos locales y aquellos que llegan a la ciudad por unos días para pasar un momento de diversión y que al final situaciones como estas lo llegan a estresar. Otro de los servicios que día a día va menguando es el del transporte público, el cual se encuentra concesionado a una empresa que prometió brindar una calidad de primer mundo, al prometer tener todos sus vehículos con aire acondicionado y pasar regularmente en cada uno de los derroteros, pero que las personas ven como cada día hay menos camiones circulando por la ciudad. Es así, como los miles de visitantes, lejos de encontrase con una ciudad en la que se garantice la diversión, se lleven la impresión de estar en una ciudad caótica que los invite a no regresar, lo que sí sería catastrófico para los siguientes años.