La recién nombrada secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, se unió el martes por la mañana a un grupo de autoridades federales fuertemente armadas en la ciudad de Nueva York, donde supervisaron las primeras redadas de deportación contra migrantes que residen en el país sin autorización legal. Estas acciones marcan el inicio de la anunciada redada del presidente Donald Trump contra la migración ilegal y marcan la primera gran operación contra los migrantes en la Gran Manzana. En videos difundidos en redes sociales, se aprecia a Noem portando un chaleco protector y participando en la sesión informativa previa a la operación. “En vivo esta mañana en Nueva York. Estoy en eso”, comentó la secretaria, en referencia a su presencia en el Bronx junto a oficiales de numerosas agencias, como la Administración para el Control de Drogas (DEA) e investigadores de Seguridad Nacional. De acuerdo con Noem, “Estamos haciendo esto bien, haciendo exactamente lo que el presidente Donald Trump prometió al pueblo estadunidense, haciendo que nuestras calles fueran seguras.” Las imágenes muestran cómo las fuerzas federales ingresan a edificios de apartamentos y detienen a individuos presuntamente vinculados con actividades delictivas. Según Noem, uno de los arrestados es un “extranjero criminal con secuestro, asalto y cargos de robo.” El despliegue de los agentes federales busca, según sus propias declaraciones, garantizar que “Estas 'bolsas de basura' como esta continuarán siendo retirándose de nuestras calles”.

Las redadas se produjeron en medio de la madrugada y sorprendieron a varios residentes que fueron testigos de la intervención en zonas como Ogden Ave., en el Bronx. Un vecino describió la escena al The New York Post tras oír un estruendo y ver a los oficiales en el vestíbulo del edificio. La DEA confirmó que está cooperando con otras agencias del Departamento de Justicia y que “otros socios federales de aplicación de la ley están ayudando al Departamento de Seguridad Nacional con sus esfuerzos de aplicación de migración” Estas redadas también son favorecidas por la flexibilización de restricciones por parte de la administración Trump, que ahora permite a las autoridades ingresar a lugares que anteriormente eran considerados “sensibles”, como iglesias, juzgados y otros espacios donde los inmigrantes sin documentos tendían a refugiarse. De acuerdo con fuentes oficiales, las fuerzas federales han estado realizando cientos de arrestos diarios en ciudades santuario de todo el país desde la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca. Tom Homan, designado como el responsable de la frontera, ha advertido que cualquier persona en situación irregular podría ser sujeta a la deportación. “Estamos haciendo esto con una prioridad [base], esa es la promesa del presidente Trump. Pero a medida que se abre esa abertura, habrá más arrestos en todo el país”. Las autoridades locales, incluyendo la oficina del alcalde Eric Adams, señalan que están evaluando el alcance de la normativa federal, especialmente en lo concerniente a la intervención de la policía local en operaciones de migración civil. 

Con información de Excélsior.