La administración capitalina Castro realizó un emotivo y respetuoso homenaje póstumo para recordar el legado de Rafael Pedroza, oficial emérito del Registro Civil.  A temprana hora de este martes, personal del Ayuntamiento de Zacatecas se dio cita en el patio central de la Presidencia Municipal para despedir y honrar a dicho servidor público.  Para iniciar la ceremonia, el alcalde de la Capital, acompañado por la presidenta honorífica del DIF, Maribel Herrera de Miranda, la síndica municipal, Ruth Calderón Babún y la secretaria de Gobierno, Magdalena Beltrán, montaron una guardia de honor.  Jorge Miranda Castro dedicó unas palabras al oficial emérito, de quien destacó se trató de un zacatecano que trasciende a la inmortalidad por el gran legado que deja en cada persona.  Recordó que su nombramiento surgió por la necesidad de “no dejar pasar una trayectoria tan importante de un hombre que siempre se condujo en la rectitud, en la amabilidad. Un hombre que sabía perfectamente el servicio público como carrera”, expresó el primer edil. Durante el homenaje destacaron que Rafael Pedroza fue oficial del Registro Civil por más de 30 años, y a quien Cabildo de la Capital le otorgó, por primera vez en la historia, el nombramiento de Oficial Emérito por su amplia trayectoria.  En voz del cronista municipal, Manuel González Ramírez, el oficial tuvo siempre una labor eficiente; además fue testigo y avaló legalmente varios miles de matrimonios y “nunca escatimó su don de gente para realizar una ceremonia con solemnidad emotividad y formalidad”.  Durante su carrera cumplió cabalmente y con creces como servidor público de la administración de Zacatecas y del estado, así como devoto esposo, padre, abuelo y amigo de infinidad de personas.  Finalmente, en representación de la administración Alejandra Flores Cosío, mencionó que el oficial Rafael Pedroza dejó un importante legado en el Registro Civil y por ello se le recordará como la persona más culta, fina, respetuosa y con una gran vocación de servicio. Destacó que el oficial demostró en vida que el trabajo dignifica.